En 1950 la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas invitó a todos los Estados miembro a instituir el 10 de diciembre de cada año como "Día de los Derechos Humanos", como conmemoración de la aprobación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, realizada por la Asamblea General en 1948. Con el transcurso del tiempo, se han desarrollado un conjunto de instrumentos y mecanismos tendientes a asegurar la primacía de los Derechos Humanos y para hacer frente a su vulneración donde fuera que ocurriera. En la República Argentina se suscribieron prácticamente todos los tratados internacionales en materia de Derechos Humanos y se los ha incorporado al plexo constitucional. En los últimos años, también se ha adecuado la normativa nacional a la establecida en dichos tratados y convenciones. No obstante ello, se hace necesario trabajar sobre los prejuicios y los estereotipos culturales aún existentes, para poder cerrar la brecha existente entre la normativa y la práctica cotidiana. En este sentido y, en el ámbito local, que es el que me compete, como Defensor del Pueblo de la provincia de Santa Fe, entiendo que esta institución debe adoptar un compromiso que trascienda la protección de los Derechos Humanos. Debe articular mecanismos de prevención, a partir de la sensibilización, la capacitación y la formación de diversos actores sociales en una auténtica cultura de los Derechos Humanos que vaya más allá de la mera tolerancia, con el objetivo de alcanzar la comprensión y el respeto por el par. Es por eso que la Defensoría del Pueblo de la provincia de Santa Fe, tiene una inclaudicable misión de magisterio en materia de Derechos Humanos, inherente a su función de organismo de control de la administración pública. Pero no sólo debe limitarse a controlar que los Derechos Humanos se respeten, sino que tiene la responsabilidad y el compromiso de accionar para que la ciudadanía los conozca íntimamente, para reclamarlos como propios y hacerlos valer, de manera tal que nunca vuelvan a ponerse en tela de juicio.La obligación de promover, proteger y garantizar los derechos humanos, compete a todos los niveles y poderes del Estado. La Defensoría del Pueblo de la provincia de Santa Fe, contribuye decididamente a esta labor, exigiendo al Estado su cumplimiento.Desde lo personal y como Defensor del Pueblo de la provincia de Santa Fe, celebro convencido este día, permanente abocado a la búsqueda de la justicia, la libertad y el cabal cumplimiento de los Derechos Humanos.