El próximo 8 de marzo se conmemorará el Día Internacional de la Mujer, fecha que procura insistir en la necesidad de que se visualice la problemática integral de la mujer.Uno de estos aspectos es el grado de violencia a la que son sometidas las mujeres, y prueba de ello son las estadísticas dadas a conocer por el Centro de Asistencia a la Víctima de la Defensoría del Pueblo.En la zona centro norte de la provincia desde el 1º de enero de 2010 hasta el 20 de enero del corriente año se registraron 1.038 denuncias, de las cuales 660 corresponden a violencia hacia la mujer.Adicionalmente, el Centro de Asistencia a la Víctima informó que desde el 22 de enero a la fecha se han recibido 47 denuncias de violencia hacia la mujer y 6 de abuso sexual infantil. En el primer bimestre las denuncias de ataques sexuales infantiles llegaron a 20. Santa Fe es la segunda provincia del país, detrás de Buenos Aires, que tiene la tasa más alta de femicidios con 17 mujeres muertas en el 2008, 28 durante el año 2009, y 25 en 2010.Y considerando al delito de Trata de Personas una de las más graves formas de violencia y violación a los derechos humanos, nuestra Institución que desde 2006 trabaja en la tarea de visualización y asistencia a sus víctimas recibió en 2008 23 denuncias de víctimas y familiares de este delito, en 2009, 17; 10 el año pasado y 2 en lo que va de 2011.De allí que el 8 de marzo debe ser el día en que las mujeres sigan exigiendo el derecho a la igualdad de oportunidades, al trabajo, la salud, a una mayor participación social y política y al derecho a una vida sin violencia. Un paso hacia ello ha sido la sanción de la ley 26.485, de Protección Integral de la Mujer, que entre otros aspectos establece cinco clases de violencia: la sexual, la económica, la simbólica, la psíquica y la física. En ese sentido, la Defensora adjunta para la zona Norte, Liliana Loyola, remarcó que “la violencia física es la que crece día a día y arroja cifras alarmantes de mujeres muertas, siendo el factor de vulnerabilidad el solo hecho de ser mujer”. “La misma no sólo no ha decrecido sino que se ha incrementado día a día, llegando al extremo de naturalizarse entre los sectores más jóvenes de nuestra sociedad, considerando a las relaciones violentas como naturales”, agregó la Defensora.Por eso nuestra visión como institución defensora de derechos humanos, en la atención diaria y concreta de este tipo de situaciones, se centra en la urgente necesidad de trabajar desde la perspectiva de género. Liliana Loyola enfatizó la necesidad de no banalizar la fecha y convertirla en un día de la femineidad como es la tendencia publicitaria, sino convertirla en un día de festejo por las conquistas obtenidas pero también de lucha y compromiso para lograr la equidad en todos los aspectos de la vida.