El defensor del Pueblo de la provincia de Santa Fe, Raúl Lamberto, recorrió este jueves los reservorios 6 y 7 de la laguna La Picasa por pedido y en compañía del presidente comunal de Aarón Castellano, Walther Ramanzín, y de productores locales. Durante la visita, Lamberto volvió a destacar la necesidad de que los equipos técnicos de las provincias de Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires trabajen en coordinación con la Nación para obtener una solución conjunta que permita conducir en forma predecible los caudales de agua.
En el reservorio 7, ubicado en la ruta nacional 7, observaron los trabajos realizados recientemente por los equipos técnicos de la provincia santafesina, que permitieron controlar el caudal limitando el paso de agua de 80 a 30 metros por segundo. Más tarde, ya en el reservorio 6, ubicado en cercanías de Rufino y a pocos kilómetros de la ruta 33, el defensor tomó el compromiso de requerir a quienes administran el sistema que realicen las mediciones necesarias para constatar que el caudal de agua que pasa por dicho reservorio sea el planificado. "Es notorio el corte acanalado que hay en el centro de esta obra y quizás sea necesario trabajar para regular la masa de agua que por allí pasa y, para tal fin, voy a realizar la solicitud a los equipos técnicos que administran los reservorios para que realicen los estudios necesarios y se constate si es correcto el caudal de agua que se desplaza del reservorio al canal", indicó Lamberto.
Por último, remarcó que “es de suma importancia continuar con la iniciativa surgida e impulsada desde las defensorías para que la nación realice una convocatoria con todas las provincias involucradas para llegar a una solución trabajada, consensuada y acordada por todas las partes”.
Por su parte, Ramanzín manifestó su preocupación por lo que sucede en el reservorio 6, en el sector ubicado dentro de la provincia de Buenos Aires, donde junto con los productores de la zona detectaron canales presuntamente clandestinos que hacen que masas de agua se vuelquen de manera irregular a La Picasa, lo que podría desencadenar el desborde de este espejo de agua. Asimismo, advirtió que en territorio bonaerense habría más reservorios en esta misma situación.
En la misma sintonía, Jorge Bruno, productor agropecuario, remarcó la necesidad de que las provincias involucradas trabajen en una solución conjunta y que se extremen las medidas de control frente a los canales que se sospecha son clandestinos y alcantarillas que desvían las aguas de los reservorios en forma directa a la laguna.
Canales clandestinos
Tras visitar el reservorio 6, los productores insistieron en recorrer la zona en busca de canales, alcantarillas y desagües presuntamente clandestinos, que fueron encontrados a escasos kilómetros de la frontera provincial entre Santa Fe y Buenos Aires. "Hoy pudimos constatar personalmente la existencia de distintas obras que desplazan el agua en forma a priori irregular por tubos y canales clandestinos y que modifican los caudales de ingreso a la laguna”, expresó Lamberto sobre las obras que se realizan en forma presuntamente irregulares y que estarían desviando las aguas de sus canales naturales o planificados y las envían en forma directa a la laguna La Picasa. Y reiteró: “Debido al cruce de las tres fronteras provinciales es de suma importancia la convocatoria de la nación para encauzar una solución definitiva”.