El defensor del Pueblo de la provincia de Santa Fe a cargo Gabriel Savino recibió este martes en Rosario a un grupo de vecinos de la localidad de Coronel Domínguez, quienes solicitaron la intervención de la institución ante su reclamo para ser eximidos del pago del canon en el peaje instalado kilómetro 14,7 de la ruta 18 a quienes habiten o tengan propiedades en este pueblo, ya que consideran la actual situación como abusiva.
Tras escuchar el planteo, Savino enfatizó: “Vamos a articular una mesa de diálogo con todos los actores y vamos a arbitrar todas las medidas necesarias tendientes a dar respuestas al planteo”. En ese sentido, el defensor agregó: “Ante la situación social y económica que estamos atravesando, generar políticas de convivencia comunes a todos tiene que ser una tarea constante de los organismos del Estado”.
Al relatar su problemática, los vecinos señalaron en una nota: “Habitamos la localidad antes mencionada, que se encuentra a 3 kilómetros de distancia del peaje de referencia y a 18 kilómetros de la ciudad de Rosario, cabecera del departamento. Esto significa, que muchos de nosotros y nuestras familias, trabajamos, estudiamos, nos atendemos médicamente, contratamos servicios, realizamos compras de primera necesidad en Rosario, y que tanto a la ida como al retornar a nuestros hogares estamos obligados día a día, y tantas veces pasemos, a abonar 100 pesos por cada vez que pasemos de costo de peaje, lo que es totalmente abusivo. Y que en pocos días vuelve a aumentar”.
Como ejemplo de esta situación, indicaron que muchas veces para comprar productos de primera necesidad, dependiendo de los horarios, deben salir de Coronel Domínguez y viajar en dirección de la ciudad de Rosario, para “poder ir a algún supermercado, veterinaria, farmacia o ferretería, los que se encuentran a tan solo 4 kilómetros” de sus casas. “Cuando regresamos a los 15 o 20 minutos de realizar dichas compras, debemos volver a abonar 100 pesos para poder retornar a nuestros hogares”, se quejaron, y remarcaron que en la localidad no cuentan con estaciones de servicios, cajeros automáticos, bancos ni hospitales.
Los vecinos consideraron que es “inadmisible no poder acceder libremente” a sus viviendas, y advirtieron que “no se cuenta con camino alternativo, la única manera es pasar por caminos rurales, convirtiendo esos 3 kilómetros en casi 11 kilómetros”. “Estos caminos con poco o nulo mantenimiento, son imposibles de transitar en días de lluvia, o en los días siguientes a cualquier temporal, poniendo en riesgo la seguridad propia y de nuestras familias y ocasionando serios y diversos daños a nuestros vehículos”, alertaron.
Relataron, además, que hace tiempo vienen realizando gestiones para ser eximidos de la obligación de abonar el peaje, tal como sucede con los habitantes de otras localidades en donde se establecen este tipo de oficinas de cobro, pero que hasta el momento no han obtenido una respuesta favorable.