La Procuración General de la Corte Suprema de Justicia y la Defensoría del Pueblo trabajan intensamente en la puesta en funcionamiento del Programa de Formación “Conformación de equipos para una Justicia Juvenil Restaurativa”, que abarcará territorialmente a toda la provincia y comenzará a dictarse desde el 21 de septiembre hasta el 22 de diciembre. Con esa finalidad, Gabriel Savino, defensor del Pueblo a cargo de la Defensoría Provincial de Niñas, Niños y Adolescentes, y el procurador General de la Corte Suprema, Jorge Barraguirre, mantuvieron este miércoles una nueva reunión de trabajo para formalizar el trabajo que se venía realizando mediante la suscripción de un convenio específico y la resolución de los últimos detalles, previos al inicio de las actividades.
La Justicia Restaurativa se presenta como una forma de respuesta al daño causado por acciones que, además, infringen la ley penal. Busca la recomposición de los vínculos sociales dañados a través del diálogo y la participación del ofensor, las personas ofendidas y la comunidad.
La Justicia Restaurativa en el ámbito penal juvenil procura la participación activa de adolescentes presuntos/as autores/as de infracción penal, personas ofendidas, familias, comunidad, a través de diferentes métodos de resolución de conflictos. Utiliza como herramienta principal el diálogo en tanto forma de reflexionar sobre los propios relacionamientos con las y los demás, las causas de las acciones que dañan y las maneras de responder a sus efectos a través de su reparación. Estas prácticas pueden ser complementarias al proceso judicial.
Al poner énfasis en la reconstrucción del vínculo social, la perspectiva que aporta la Justicia Restaurativa se orienta al compromiso de organizaciones barriales, centros culturales, centros de salud, escuelas y organismos gubernamentales de niñez y adolescencia en el abordaje y la gestión de conflictos que involucran a adolescentes.
De esta manera, se resalta la importancia de la articulación del Sistema de Protección de Derechos y la corresponsabilidad de todos los actores involucrados en torno al desarrollo integral de las y los adolescentes.
El programa
El programa de formación y capacitación de facilitadores restaurativos estará a cargo del reconocido abogado especialista en justicia penal juvenil y prácticas restaurativas Raúl Calvo Soler, tendrá una duración de 32 horas dictadas en clases en modalidad sincrónica y asincrónica, y constará de cuatro módulos: 1) la preparación de la intervención restaurativa; 2) trabajo con victimario. Estrategias de gestión; 3) trabajo con víctimas. Estrategias de gestión; 4) diseño y ejecución de estrategias restaurativas.
Los esfuerzos conjuntos de la Procuración General de la Corte y de la Defensoría del Pueblo están destinados a la formación de facilitadores restaurativos.
Se entiende por facilitadores restaurativos a los y las agentes que con carácter imparcial técnico, en posesión de conocimientos, destrezas y competencias adecuados, independiente de los actores institucionalizados del proceso penal, auxilia y diseña estrategias restaurativas en relación a dos o más personas implicadas en un delito o falta, en calidad de víctima/s e infractor/es, a comprender el origen del conflicto, sus causas y consecuencias, a confrontar a sus puntos de vista, elaborar acuerdos sobre el modo de reparación tanto material como simbólica. Además, en el caso de los infractores, a reconocer, responsabilizarse y sentirse obligado con el propósito de evitar reiterar quebrantos normativos penales o contravencionales; y, en el de los potenciales, a tomar intervención temprana a fin de prevenir la comisión del quebranto mismo.
Público destinatario
Las personas interesadas en participar del programa de formación deberán reunir conocimientos en resolución de conflictos, contar con destrezas tales como pensamiento creativo y crítico, capacidad de empatizar, diversificar la comunicación y construir procesos, y contar con recursos para el buen manejo de la incertidumbre.
La actividad está dirigida referentes del sector público, privado y de organizaciones no gubernamentales. Se apunta especialmente a agentes, miembros, funcionarios y empleados de la provincia de Santa Fe, de las municipalidades y comunas, del Ministerio Público de la Acusación, del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal, a referentes de iglesias y confesiones, empresas, sindicatos, organizaciones no gubernamentales y otras instituciones y organizaciones de la sociedad civil de reconocida trayectoria en la consecución de las finalidades del programa, para que tomen activa adhesión y participación en él, capacitando facilitadores restaurativos propios, integrándolos a una red común y ofreciéndose como “referentes positivos”.
Se entiende por “referente positivo” a la persona o institución que puede acompañar al joven durante su tránsito por un programa restaurativo, y que pueda ayudarlo para que sostenga las condiciones restaurativas en otros espacios no necesariamente vinculados al detonante de la intervención restaurativa.
La inscripción es abierta y gratuita, con cupos limitados.
Para inscribirse sólo hay que completar el formulario disponible aquí