Este miércoles, en una audiencia convocada de oficio por la Defensoría del Pueblo y la carrtera laboral, la empresa Azul Combustibles SA levantó la sanción que había impuesto al trabajador Exequiel Schaab, tras haber aportado filmaciones de las cámaras de seguridad que permitieron esclarecer el femicidio de Agustina Imvinkelried. La audiencia, celebrada en la sede del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social en Esperanza, estuvo encabezada por la coordinadora de Relaciones con la Ciudadanía de la Defensoría del Pueblo, Eleonora Avilés y el secretario de Trabajo, Leonardo Panozzo.
Avilés afirmó que "la presencia de la Defensoría del Pueblo puso de relieve la importancia del tema en cuanto a que el compromiso, en un flagelo en el cual, niñas, adolescentes, jóvenes y mujeres están involucradas, involucra a toda la sociedad y no solamente a los poderes del Estado".
La coordinadora, también destacó que "entendiendo que ésta es una responsabilidad que atañe a lo empresarial, sindical y a la ciudadanía. La audiencia revalorizó la actitud del trabajador, puesto que el compromiso de toda la sociedad permitirá que podamos visibilizar estas situaciones, prevenirlas y erradicarlas pudiendo vivir en una sociedad libre de violencia. Además, la Defensoría, a través del Centro de Asistencia a la Víctima, sigue a disposición para acompañar a Ezequiel y a su familia".
A su turno, Panozzo detalló: "Convocamos de oficio a esta audiencia con el objetivo de que se levante la sanción del trabajador. Aquí, hicimos conocer nuestra sorpresa y descontento por la sanción, poniendo en contexto el accionar de un joven en una situación relacionada ante un hecho gravísimo como es un femicidio".
"El trabajo en conjunto entre el ministerio y la Defensoría del Pueblo permitió que la empresa revise su postura, levante la sanción y, sobre todo, pondere el gesto solidario y el compromiso con la sociedad que manifestó Exequiel Schaab", afirmó el secretario de Trabajo.
Durante la reunión y tras el pedido de revisión de la sanción y consecuente pago de los días caídos, la empresa asumió como "errónea" la decisión adoptada y reconoció que "no se advirtieron las consecuencias en la comunidad de la sociedad esperancina" como tampoco "el contexto en el que se cumplió el actuar del trabajador". De esta manera, la empresa dejó sin efecto la medida disciplinaria aplicada y no descontará suma alguna en los haberes del trabajador. Además, la empresa reivindicó "los valores personales que merecen destacarse" del trabajador.